“Hay algo peor que la angustia de la página en blanco. Algo peor que no tener ninguna historia que contar: es haber oído demasiadas, y no poder olvidarlas.”
FABIAN POLOSECKI (1964-1996)

miércoles, 25 de junio de 2008

EL HAMBRE VS LAS GANAS DE COMER


No nos engañemos. Ninguno de los dos tiene buen equipo. A duras penas Belgrano llegó forzosamente a esta instancia por el azar de otros resultados y poco mérito propio. Racing hizo una campaña desastroza y luego de tres campeonatos flojísimos está a punto de caerse al precipicio. Se pordía decir, sin temor a equivocarnos, que es un duelo de dos tipos hambrientos con la varilla de pan en la mitad de la cancha.

No obstante mi fanatismo por Belgrano, reconozco que siempre le tuve simpatía a Racing. Será porque me identificaba con ese equipo sufrido y pechador. Compartía, además, esa idea académica de que "todo tiempo pasado fue mejor."

Hay, entre la escuadra de barrio Alberdi y la de Avellaneda coincidencias históricas. Para que se entienda, no es Federación Agraria y la Sociedad Rural, son más bien víctimas de esa patología llevada al paroxismo que llamamos fútbol.

Visten camiseta celeste. Tienen en su haber más tristezas que algerías, más dolores de cabeza que copas en la vitrina. Meten más de lo que juegan. Sus hinchadas son fieles y seguidoras como perros de caza. Uno lucha por ascender, el otro por no bajar de categoría. Los dos son grandes. Uno, del país, el otro, de Córdoba. Esta noche se verán las caras. Serán 90 minutos a todo o nada.

El jogo bonito no está invitado al Chateau Carreras, la casa se reserva el derecho de admisión. Partido de hacha y tiza, como decían los viejos relatores.

Es sabido que la objetividad no existe, aunque muchos levanten la bandera con esa consigna. Pero en cuestiones futbolísticas, esto nadie lo discute. Hoy; mi corazón, mi cabeza y mi cuerpo estarán sumergidos bajo tintura celeste. Lo dejaré en reposo hasta las 21.10. Recién allí me secaré un poco y me sentaré a verlo por TV. Es la primera vez, luego de tres promociones al hilo, que no estaré en la cancha alentando. Seguiré mi cábala de antaño. Televisor en mute, radio encendida en una mano y camiseta estrangulada en la otra. Si la cosa viene muy fulera, siempre está el recurso del crucifijo bendecido por el Padre Oscar en la comunión.

1 comentario:

No, gracia a vo´ dijo...

Querido y Estimado Fernando:

Que partidito que tenemos para hoy a la noche. Nada de Eurocopa o final de la Libertadores. Hoy el menú esta servido: Rasshin - Belgrano, Belgrano - Rasshin!

Será una guerra. Será un partido para que los padres sienten a sus hijos en el sillón y les marquen que no deben hacer en una cancha de fútbol. Porque van a haber miles de errores!

Suerte para la trastienda!

Migue