“Hay algo peor que la angustia de la página en blanco. Algo peor que no tener ninguna historia que contar: es haber oído demasiadas, y no poder olvidarlas.”
FABIAN POLOSECKI (1964-1996)

miércoles, 19 de noviembre de 2008

ODA A LA ALMOHADA

Llego tarde y no me pregunta cómo me fue.
Siempre me espera acostada, nunca en puntas de pie, ni con una taza de café en la mano.
Tapada hasta el cuello, apenas balbucea un “buenas noches”.

Me conoce. Sabe que cuando no tengo ganas de hablar no tiene otra escapatoria que dormir.
Cierra los ojos y sueña que mi cabeza le arruga su cara.
Se despierta en la madrugada para ir al baño, pero casi nunca se levanta. Le da fiaca pisar el piso helado con sus pies de pluma.

Cuando la enrosco en el medio de la noche seguro tose y pide auxilio a la oscuridad. Yo no la escucho. Estoy ocupado en soñar cosas que no voy a recordar dentro de ocho horas.
Es masoquista, le gusta sentirse ahorcada por tenazas represivas.
Es su forma de dejarse querer.

No puedo decir que es simpática. No me consta. Jamás le vi sus dientes.
Es una mina fiel y silenciosa. Como esa letra ache que lleva oculta en su DNI.
Lo bueno es que no ronca ni sufre pesadillas. Tampoco tiene los pies fríos.
Es la dama más dócil que conocí. No hubo otra igual. Con ella sí que me voy a dormir.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

"Es la dama más dócil que conocí. No hubo otra igual. Con ella sí que me voy a dormir" torito no te olvides nunca que no hay mujer dócil, sólo simulamos serlo mientras dormimos. Besos, la turca.

Ferdydurke dijo...

Dejame soñar. Y dejame decir que hay minas dóciles, como mi almohada. Si no las hay ni en la literatura, estamos jodidos.

kmilion De la Rosa dijo...

Oda a Mi Almohada
Tú, delicada y suave bolsa de genero
rellena con nubes de cielo
La que siempre está para mí;
para descansar mi cabeza.

Tú, la que de día relajas y acompañas
y de noche en silencio escuchas
mis vivencias en los días buenos
e influyes en mis ideas
y anhelos mientras miro el cielo.

Tú, la que sin preguntar nada
te dejas ser apretada mientras
recibes mis lágrimas en silencio,
y balbuceos llenos de lamentos
en esos días que no son buenos.

Tú, la que eres confidente invisible
en mis noches de pasión
con personas extrañas a nuestra relación
siempre sigues estando ay para mí
mientras ella se viste para poderse ir.
Tú, la única
He tratado de cambiarte por otras;
pero ninguna es como Tú;
Aun así sigues siendo fiel
Y me esperas cada noche
para hacerme dormir bien.


una q hice yo..xd saludos