“Hay algo peor que la angustia de la página en blanco. Algo peor que no tener ninguna historia que contar: es haber oído demasiadas, y no poder olvidarlas.”
FABIAN POLOSECKI (1964-1996)

domingo, 21 de febrero de 2010

EL ASESINO ILUSTRADO (III entrega)

- A cada víctima, usted le dedicó una carta, a modo de crónica periodística.
1) María Paz Centello, le aplicó tres tiros en la nuca, cuando entraba el auto a su cochera: “ La objetividad se fue con ella”.
2) Horacio Romero Funes, lo ahorcó con su propia corbata y lo envolvió con una remera de Bochini: “El único independiente es el de Avellaneda”.
3) Abril Contreras, primero lo noqueó de una trompada en el mentón y después le tiró la computadora encima: “En otoño, la sangre seca mejor”.
4) Julio Sacripanti, una vez anestesiado le clavó veinte lapiceras bic sobre la espalda, la sangre inundó la habitación: “ Con tinta llegaste, con tinta te fuiste”.
5) Alejandro Pernacky, Lo ahorcó con las dos manos: “Sucio mercenario. Masticarás tu propio polvo”.
6) Gregorio Salinger, le ató el pene a una soga y luego lo calcinó en el horno junto a un ejemplar de Un guardián entre el centeno: “Me dio pena por tu glorioso apellido, pero no eras más que un escriba del poder de turno. Muerto es donde mejor servirás a la patria”.
7) Arístides Royal Hokes, lo ahogó en la bañera, dándole golpes en la cabeza con una sopapa para destapar el inodoro. “Deberías haber muerto ahogado en el río, por inundarnos a mentiras”.

- ¿Ya tiene el próximo título?, me preguntó desafiante.
- Es la primera pregunta inteligente de la tarde. Claro que lo tengo, pero si se lo digo pierde la gracia. Y la gracia y la dignidad son las dos últimas cosas que debemos perder los que ya perdimos la libertad.
- ¿Es feliz?
- Hasta que no termine con la lista que tengo pendiente, jamás podría afirmarlo. Pero oliendo la sangre de mis futuras víctimas, siento algo muy parecido a la felicidad. Aunque no es exactamente eso. Ponga eso que dijo Lennon, que la felicidad es un revolver caliente. Le di un gran título, no se puede quejar.

No hay comentarios: